2/6/10
Los Profesionales
-Nada es para siempre, excepto la muerte (…).
-Todos ellos murieron por un ideal.
-¿La revolución? Cuando el tiroteo termina los muertos se entierran y los políticos entran en acción. El resultado es siempre igual. Una causa perdida.
-La revolución es como la más bella historia de amor. Al principio, ella es una diosa, una causa pura, pero todos los amores tienen un terrible enemigo.
-El tiempo.
-Tú la ves tal como es. La revolución no es una diosa sino una mujerzuela; nunca ha sido pura ni virtuosa ni perfecta. Así que huimos y encontramos otro amor, otra causa, pero sólo son asuntos mezquinos. Lujuria pero no amor, pasión pero sin compasión. Y sin un amor, sin una causa, no somos nada. Nos quedamos porque tenemos fe. Nos marchamos porque nos desengañamos. Volvemos porque nos sentimos perdidos. Morimos porque es inevitable.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario